Su padre es un hombre muy ocupado y no pasa mucho tiempo en casa. Para que su hija no esté triste por lo de no tener mano, manda crear a unos científicos un híbrido de delfín y caballo.
El cabrón tiene dinero para crear esa monstruosidad, que debe de costar una barbaridad de millones invertidos en ciencia, pero no para hacerle una mano nueva a su hija. Es ese padre que lo arregla todo con regalos y cree que ese bicho mitad delfín mitad caballo es lo máximo que puede querer una hija.
¿Y se equivoca? ¿No es el regalo soñado por cualquier niña? ¿Es mal padre? jaja, no se. Déjame.
yo no comentaba por lo del subtítulo del blog, por no romper la magia.
ResponderEliminarMuy buena imagen. Las juventudes mancas de hoy día...
ResponderEliminarYo comenté precisamente por el eslogan, caí en la trampa, en ese chantaje emocional.
ResponderEliminarNo hombre, la magia se puede romper de vez en cuando. "No pasa nada. Se compra otra"
ResponderEliminarAtenzzione! (qué hace hablando italiano?) ¡Voy a subir más el chantaje del subtítulo!
Joder, había leído "Petarlo" y me parecía muy lógico.
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